Son mis voces cantando
para que no canten ellos,los amordazados grismente en el alba,
los vestidos de pájaro desolado en la lluvia.
Hay, en la espera,
un rumor a lila rompiéndose.
Y hay, cuando viene el día,
una partición de sol en pequeños soles negros.
Y cuando es de noche, siempre,
una tribu de palabras mutiladas
busca asilo en mi garganta
para que no canten ellos,
los funestos, los dueños del silencio.
A. Pizarnik
4 comentarios:
Hola después de tanto tiempo desaparecido ando visitando tu blog, espero y te encuentres muy bien...
Un abrazo en la distancia...
Tú amigo tomm
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